La Universidad de California está trabajando en un proyecto para facilitar la vida cotidiana de los diabéticos. Los investigadores han intentado encontrar una solución para poder medir los niveles de azúcar en sangre sin necesidad de agujas.
Por normal general, un diabético debe pincharse unas 8 veces al día para poder controlarse. Sin embargo, este proyecto ha dado con una posible solución: un tatuaje temporal, como si se tratara de una pegatina, y que viene relacionado con un sensor. Tras cada comida, los electrodos de este sensor producen una corriente que dura diez minutos y esta corriente detecta el nivel de azúcar.
Según uno de los creadores de este método de punción digital “cada tatuaje digital tiene una duración máxima de un día y su precio sería de menos de un euro la unidad”.
Este proyecto se basa en otro dispositivo, el GlucoWatch, presentado en 2002 que también utilizaba la tecnología electroquímica, pero que no se llegó a vender porque provocaba problemas en la piel. En este caso, se apuesta porque este nuevo proyecto pueda llegar a comercializarse.
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Fuente de la noticia y de la fotografía OMICRONO
