Devicare y nueve hospitales españoles de referencia en urología han completado con éxito el ensayo clínico que demuestra la eficacia del uso combinado de un dispositivo médico (Lit-Control® pH Meter) y un nutracéutico para prevenir la calcificación de los catéteres doble J mediante el control del pH urinario y el aporte de inhibidores de la cristalización. El uso de catéteres de doble J es habitual en la práctica diaria de los urólogos.
Este estudio pionero a nivel internacional, cuyos resultados se presentarán en la Reunión de los Grupos de Litiasis, Endourología, Laparoscopia y Robótica de la Asociación Española de Urología el próximo enero en Palma de Mallorca y en el Congreso de la Asociación Europea de Urología en marzo en Barcelona ante más de 10.000 urólogos, da respuesta a una necesidad médica no resuelta que afecta a una parte importante de los pacientes afectados de urolitiasis.
“Estos resultados clínicamente significativos demuestran que tenemos una solución que facilitará la praxis médica y aportará seguridad en el manejo del paciente implantado con un catéter doble J. Será una verdadera revolución” explica el Dr. Carlos Torrecilla, investigador principal del ensayo, jefe de la Unidad de Litiasis del Hospital Universitario de Bellvitge y coordinador del Grupo de Litiasis y Endurología de la Asociación Española de Urología (AEU).
Un total de 105 pacientes han participado en el ensayo multicéntrico, aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo que se ha llevado a cabo durante este año en el Hospital Universitario de Bellvitge, el Hospital Universitario La Paz de Madrid, el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, la Fundació Puigvert, el Hospital Universitario San Cecilio de Granada, el Hospital Universitario de Valme de Sevilla, el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, el Hospital Universitario La Fe de Valencia y el Hospital Universitario de Santiago de Compostela, con la participación del laboratorio de Investigación en Litiasis Renal de la Universidad de las Islas Baleares.
El estudio abre las puertas a otras patologías urológicas
El enfoque innovador de Lit-Control® ha generado un gran interés de la comunidad médico-científica tanto en la realización del estudio como los resultados que se derivan. Además de probar la eficacia clínica del producto, se ha adquirido un mayor conocimiento del proceso de incrustación en el que ha tenido un papel importante el Dr. Fèlix Grases y la Dra. Antonia Costa del Laboratorio de Litiasis de la Universidad de las Islas Baleares.
Desde la dirección científica de Devicare, y en palabras del Dr. Jordi Cuñé, se considera que este ensayo “es un éxito rotundo que valida la hipótesis de trabajo y refuerza nuestra apuesta firme para aportar soluciones innovadoras en el campo de la urología”. La base científica y tecnológica lograda “nos permitirá profundizar en el campo de los catéteres, así como aproximarnos a la investigación de otras necesidades no cubiertas como la prevención de las infecciones en el paciente sondado (Catheter Associated Urinary Tract Infection)” avanza Cuñé. Se trata de un tipo de paciente altamente prevalente en la población geriátrica con daño medular o alteración cognitiva y con impactos laterales como son el alto consumo de antibióticos y la generación de resistencias asociadas.
En los últimos dos años, Devicare ha diseñado un ambicioso programa de desarrollo de nutracéuticos y medical foods, “que queremos dotar de evidencia clínica con el más alto rigor y con la colaboración de los mejores urólogos como ha sido en el estudio Doble J” asegura Jordi Cuñé.
¿Qué es el catéter doble J?
El catéter doble J o ureteral es un dispositivo tubular, con un diámetro pequeño, de diferentes materiales como la silicona, que se implanta en los pacientes para facilitar el paso de orina del riñón a la vejiga cuando el uréter está obstruido por una piedra, así como para prevenir dicha obstrucción. En estas situaciones, el catéter puede llevarse desde unos días, hasta semanas o meses.
Asimismo, su uso también está ampliamente extendido en el manejo médico de obstrucciones crónicas benignas o malignas, trasplantes, malformaciones o en derivación paliativa. En estos casos el catéter puede estar implantando durante largos períodos de tiempo, e incluso de forma crónica, y es muy susceptible a procesos infecciosos y a la incrustación.
Tan solo en España se implantan cada año unos 90.000 catéteres doble J, siendo la calcificación una de las complicaciones más habituales. Debido a los cambios de hábitos en la dieta, el aumento de la temperatura global y otros factores aún no identificados se está observando un incremento en la incidencia de piedras o litiasis renal (1).
Más información en:
- Entrevista al Dr. Carlos Torrecilla: “Tenemos la solución para prevenir la calcificación del catéter doble J”
- Blog www.cateterdoblejota.com
Notas de prensa (Castellano | English)
(1) Sorokin I., Mamoulakis C., Miyazawa K., Rodgers A., Talati J., Lotan Y. (2017). Epidemiology of stone disease across the world. World J Urol. doi: 10.1007/s00345-017-2008-6.